Tus acciones te definen.

"No hay honor en esta guerra, ni en ninguna."

La guerra, el hecho más desgarrador e injusto que existe, el momento culminante de un conflicto, la cúspide de la tensión, de la indiferencia, de la alevosía y la nocturnidad... Paz y guerra, día y noche, amor y desamor, amistad y odio.

Palabras enfrentadas, contradicciones, problemas, errores, caídas... Tropiezas con la misma piedra una y otra vez, sin antes darte cuenta de que muchas otras personas te esperan, otras están atentas a cada paso que das y otros te observan por el mero hecho de saber qué está pasando.

La competición comienza cuando hay una sola "cosa" para muchos, puede ser comida, un puesto de trabajo, una plaza para entrar en una carrera, el chico al que deseas desde hace tiempo, o la candidatura de un partido político.

Todos hemos competido alguna vez, y todos los habremos hecho pensando que estábamos esforzándonos por algo que anhelábamos. Aun así, ¿alguna vez nos hemos parado a pensar si "en el amor y en la guerra todo vale"?

He de confesar que yo, sí lo he hecho, y he llegado a la conclusión de que cada uno debe mostrarse tal y como es, sin hacer alusión al contricante, al enemigo o al adversario. Cada cual debe demostrar que vale, debe hacerse notar sin tener por ello que destruír al otro. No se debe caer bajo, ni tampoco se debe agachar la cabeza. Todos somos iguales, o al menos, todos debemos serlo.

En el amor y en la guerra, no todo vale. No vale matar, no vale arrastrarse, no vale destruír... ¿Sabéis que vale? Vale la crítica constructiva, las ganas de trabajar, la ilusión, la confianza en uno mismo, la experiencia y los avales. No hay mejor aval que un grupo de personas que te apoye, que apoye tu proyecto, que se comprometa contigo y tu equipo. No hay mejor aval que la sonrisa de la persona que un día podrá decidir si tu vas a ser su representante.

Sé cuando un político miente, cuando otro trata de mentir. Sé cuando un político finge, y cuando otro es transparente. Sé cuando un político intenta dar un buen mitin, y sé cuando otro lo hace sin nisiquiera darse cuenta. Unos pueden ser buenos gestores, y otros buenos políticos. La clave está en ser ambas cosas y en saberse rodear de gente válida.

El próximo 22 de mayo todos tenemos una cita. En cada colegio electoral tendremos la posibilidad de elegir a nuestros representantes. Y sí, puedo decir que por primera vez podré votar en unas elecciones autonómicas y municipales. He esperado este momento desde que era pequeña, y sé que ahora, es una obligación, la cual realizaré con mucho gusto.

Teniendo en cuenta todo lo expuesto anteriormente, y dados los conocimientos aprendidos en estos dos años carrera, puedo decir que tengo la suerte de tener un gran presidente en mi Comunidad. Siempre lo digo y no me canso; y es que Guillermo, antes de ser político es persona, y eso es algo que la gente valora muchísimo.

Ese vídeo creo que es la mejor definición de la persona que os hablo. Todo iría mejor si todos "Celebrásemos la vida".

La guerra es muerte, y la paz es vida.

María.