lunes, 25 de junio de 2012

Conciencia de Persona para ser Políticos.

Todos en algún momento tenemos esa sensación de sentir que algo nos falta. Desconocemos el qué, quién, cómo o cuándo, o quizás no... Quizás simplemente querríamos desconocer todo eso pero no podemos pasar en el intento de esperar algo que no llega.

En un momento en el que la participación se convierte en el adalid de la política llegamos a lo que debería considerarse un punto de inflexión en torno a qué esperan los y las ciudadanas de nosotros y que les podemos ofrecer.

Es aquí donde quiero depararme un instante. La ciudadanía -y nosotros no dejamos de ser ciudadanos- espera de nosotros lo que quizás nunca debimos dejar de hacer. Del mismo modo, cada uno de los ciudadanos y las ciudadanas en calidad de personas sin etiquetas esperamos que alguien nos quiera, nos comprenda, nos entienda, nos escuche y nos trate con cariño. Y es que en definitiva, todos esperamos a alguien que quiera lo mejor para nosotros, que sepa perdonar, que entienda que la palabra es el único método para el entendimiento -que hablando se entiende la gente- y que la educación es la mejor arma para combatir la ignorancia.

Entre el ser y el deber ser siempre hay un trecho y en este caso no iba a ser de otra manera. 

En la mañana de hoy, el senador del partido popular, el señor Morano, ha votado en contra de la disciplina del partido pero en favor de los ciudadanos que le votaron en su territorio que no es otro que León. Un lugar que está siendo sacudido como el resto de España y dónde la minería ha sido uno de los grandes activos del norte de nuestro país y ahora se manifiestan para reivindicar que el carbón se defina como un sector estratégico.

Los mineros sienten que el gobierno está jugando con ellos, con sus puestos de trabajo y en definitiva con sus familias que son quienes también sufren las consecuencias.

Hoy desde aquí alabo la actitud de este senador que antes de ser político, es persona y que como tal ha actuado. O mejor dicho, ha actuado como buen político pensando en lo que era mejor para los ciudadanos y ciudadanas que le eligieron como senador. Ha actuado con verdadera conciencia política, como debería ser, aunque a su partido parece ser que no le ha gustado su actitud y le ha abierto expediente con su correspondiente sanción económica. 

Entiendo que los partidos, o al menos el mío, nacen con el fin de servir al interés general porque es para eso para lo que se conforman los gobiernos que están compuestos por personas que se agrupan en partidos políticos. Si en alguna ocasión me veo en la tesitura de tener que decidir entre la disciplina de partido o lo que es mejor para los ciudadanos, sin duda optaré por lo segundo.

No debemos olvidar de donde venimos, y venimos de ser ciudadanos para servir para ellos. Si perdemos esa esencia lo perdemos todo. 

Un abrazo y hasta pronto.

María Núñez.

domingo, 10 de junio de 2012

Cuestión de confianza.


Cuando las cosas van bien, no somos capaces de valorar lo que realmente tiene valor, en cambio, cuando las cosas no van tan bien, somos capaces de aprender a valorar lo que quizás antes no nos habría causado sensaciones tan sumamente satisfactorias.

En los últimos tiempos he reforzado algo que ya sabía que existía: El valor de la lealtad, la amistad y la confianza.

En tiempos en los que lo "interno" se filtra a lo "externo" a veces no siendo todo lo real que fue, me ha dado por ponerme a hacer esto que se llama pensar, y he llegado a varias conclusiones. La primera de ellas es sin duda que la LEALTAD no cae del cielo sino que alguien se la gana a base no sólo de palabras sino también de hechos que demuestran que se convierte en merecedor de la misma. 

Llegados a este punto, entiendo que la AMISTAD (pero la de verdad) es el motor fundamental para que esto se produzca. Alguien es leal a quien se lo gana a base de esfuerzo y de motivos. Tuve motivos para ser leal a unas siglas, a una organización y sobre todo a una persona que depositó en mi su confianza casi desde que me vio por primera vez. La CONFIANZA ni se compra ni se vende, se gana. ¿Y sabéis como se gana? Teniendo como mejor aliado al trabajo, la ilusión y la lealtad.


Tengo que hablar del pasado para poder hablaros de presente. Y es que hace unos días tuve la oportunidad de poder aclarar con una compañera malos entendidos. Le contaron de mi una realidad de que no existía y que por tanto se basaba en un espejismo, y tuve la oportunidad de poder mostrarme tal y como era, tal y como siempre he sido para que viese que todo lo que anteriormente había creído de mi nada tenía que ver con lo que realmente era. 

He tenido tiempo además de sentarme tranquilamente con el que desde hace más de 8 años considero uno de mis mejores amigos, profesional donde los haya y una persona que consigue todo lo que se propone porque ganas, ilusión y esfuerzo no le faltan. Hemos trabajado juntos en muchas cosas, y estoy convencida de así seguirá siendo. Somos un equipo, porque para ser un equipo se necesitan esas tres cosas: Lealtad, Amistad y Confianza.

Hace casi dos años, la primera vez que tuve delante a quien a día de hoy conforma algo importante en mi vida, le juzgué sin antes depararme a conocerle. Hice oídos sordos de lo que tenía delante fiándome de lo que decían quienes nada sabían de él. Cometí un error, y lo subsané. A día de hoy, puedo decir y digo que es una de las personas más leales que he conocido en mi vida. Sé que para él, el valor de la amistad y la confianza están por encima de cualquier interés, ya que la lealtad bien merecida está por encima de cualquier interés.

Lo que trato de deciros hoy es que ante la necesidad de cambiar el mundo y darle la vuelta, necesitamos que se recuperen valores tan importantes como la Lealtad y la Confianza. Insisto en la idea de que ni se compran ni se venden, simplemente se ganan, y no precisamente a base de dinero sino a base de trabajo y meritocracia.

Me quedan seis días para dejar esta ciudad donde he disfrutado, he llorado, he reído y he aprendido, pero sin duda me llevo amigos, de los buenos, entre los que se encuentran Ruth y Borja. Por haber estado, por estar y porque sé que seguirán estando.

Comenzamos...

María ;)

sábado, 2 de junio de 2012

Memoria Histórica Colectiva.

Hoy es una día especial. En un día como hoy hace 88 años nacía mi abuelo Ignacio, sin duda, el mayor referente que tengo para creer en la palabra POLÍTICA.

Muchas veces he hablado aquí de lo que el supuso y sigue suponiendo para mi. El no poder darle un abrazo reconozco que es algo que llevo bastante mal, pero me queda algo, su recuerdo en mi memoria. Y es eso de lo que hoy quiero hablaros, de la memoria. 

Para muchas personas de este país, lamentablemente hablar de Memoria Histórica sólo representa el pasado, en cambio, para mi, representa el pasado, presente y futuro de este país y sus ciudadanos y ciudadanas.
El pasado nos marca y nos condiciona, y no debemos ni podemos olvidar la historia que hacen que nuestro país sea de una manera y no de otra.

Pensar en el futuro, sin olvidar el pasado y actuando en el presente. Creo que esa es la clave para hablar de Memoria Histórica Colectiva.

Mi proyecto de fin de curso para una de las asignaturas de este penúltimo curso de mi carrera se está convirtiendo en una gran motivación. 

Decidí investigar sobre la Memoria Histórica, decidí crear un Centro de Memoria Democrática. Y os preguntaréis que de qué estoy hablando. Pues muy fácil, hablo de la necesidad de que los más pequeños conozcan la historia de España y que entiendan que no hay mejor arma que la palabra para combatir el miedo. Nunca una sociedad fue justa ni libre si se usaron las armas en lugar de la palabra. 

En tiempos como estos donde encontrar trabajo es encontrar un tesoro, considero que los gobiernos tanto autonómicos como el gobierno central deberían apostar más que nunca por la formación y la educación porque un país cuyos ciudadanos y ciudadanas no han sabido dar la importancia que merecen estas dos palabras, jamás lograrán entender por qué es imprescindible invertir en ellas. 

He visualizado que ni en el Ministerio de Cultura ni en la Consejería de Cultura de la Junta de Extremadura se ofertan subvenciones para jóvenes emprendedores con ideas innovadoras, ni para la formación, ni para el progreso académico y educativo...

Cada día que pasa reconozco menos el país en el que vivo y la Comunidad en la que tuve la suerte de nacer. Antes sabía que crecía en una sociedad donde la igualdad de oportunidades era la premisa clave para el progreso, ahora, cada día me acuesto pensando con qué habrán acabado al día siguiente.

Badajoz fue la provincia más represaliada de toda España durante la Guerra Civil y la dictadura, el aprobar la Ley de Memoria Histórica en el año 2007 no fue el fin de un bonito sueño sino el comienzo de una lucha que no debe acabar hasta que se haga verdadera justicia.