sábado, 1 de diciembre de 2012

Lo esencial es invisible a los ojos.



Veréis, el otro día cuando conmemorábamos el Día Internacional Contra la Violencia de Género vi muchas caras conocidas y otras que no lo eran tanto; pero si he de seros sincera, me habría gustado ver más caras conocidas o desconocidas.

Ahora que estoy pasando por este trance de cambio, aun no sé lo que me deparará el futuro. Pero entiendo el hecho de que muchos y muchas no me entendáis porque me habéis conocido así, siendo un "ser político" y puede que os cueste imaginar que precisamente esto por lo que tanto me he desvivido, haya dejado de ser para mi una prioridad. Lo cierto es que no les culpo a quiénes no logran comprenderme pero aun así me gustaría que por un momento lo intentaran. 

Día a día veo como la ciudadanía espera más de un partido que como el nuestro estuvo en la cima. Sé que esto es una montaña rusa y que unas veces se está arriba y otras abajo, pero no sé si de verdad hemos tocado el fondo. Desde la sinceridad más extrema debo confesaros algo, algo que quizás mi abuelo lleve viendo en mí desde hace un año, algo que otros podréis estar intuyendo y algo de lo que muchos os hayáis percatado. Ese algo es la decepción, la tristeza y la desilusión que me acompañan. Y siento todo eso porque como ciudadana me siento defraudada y como militante me siento decepcionada. Como persona he llegado a sentirme perdida pero mi camino vuelve a encauzarse teniendo como coste de oportunidad el tener que alejarme de esta vida de desenfreno acumulado, esta vida política en la que tanto he currado y en la que tantas buenas personas y amigos he conocido. 
He de deciros algo y e que no todo lo que he podido conocer ha sido bueno, de ahí parte de mi decepción. Entiendo el hecho de que no se le puede caer bien a todo el mundo y mucho menos dentro de una organización política, pero todo tiene un límite, y en el momento en que todo ha comenzado a afectar a mi vida personal y académica he decidido que llega el momento de decir adiós.  Seguiré trabajando por esta sociedad desde los instrumentos que me brinden, desde mis capacidades teóricas y prácticas, y desde las cualidades que me ha brindado la vida. Seguiré siendo la misma en ideas y principios, igual de luchadora e inconformista pero desde otro "stadio". Lo haré desde ese stadio del que nunca debimos olvidarnos porque formamos parte de él: el de la ciudadanía, el de seres iguales, el de la gente común y corriente. 

Esta España en la que vivimos, llena de cambios como la vida misma, como todo ser humano, es quizás la que me haya hecho darme cuenta de algo y es que tendré que marcharme lejos para poder cumplir todos mis sueños. Porque ahora no tendré límites, ni yugos, nada que  me impida alejarme. Atrás quedaré muchas cosas pero no mucha gente porque os seguiré llevando en mi corazón. Día a día mi familia seguirá siendo la clave para superarme a mi misma, y por favor, no creáis a quien os diga que no podéis conseguir algo por complicado que parezca. 

Extrañaré muchas cosas y a mucha gente, pero será el precio a pagar por ir en busca de mis sueños. Se que mi camino siempre estará guiado por una luz que es la que cada noche aparece en mis sueños. Olivenza seguirá siendo mi rincón preferido, mi paraíso, el lugar perfecto para perderse y encontrarse, y volveré, prometo que algún día volveré. Lo imposible sólo tarda un poco más, por eso cada día queda un poco menos para hacerlo posible.

Gracias por todo lo que me habéis dado, por cada momento, cada sonrisa y cada lágrima en nuestros mítines llenos de emociones, gracias por vuestras palabras sinceras y llenas de aliento. Os espero, en aquel lugar donde tuve esa señal que hizo que me encontrase a mi misma, aquella noche, en aquel lugar, sintiendo la cálida brisa del mar bajo la luz de las estrellas. Os espero en aquel lugar donde la felicidad es posible y donde no hay sueños imposibles. Si algún día pasáis por allí, trataré de regalaros esos pedazos de felicidad que un día tuve oportunidad de sentir como propios y reales. Gracias y hasta siempre amigos, amigas, compañeros y compañeras. 

Hasta siempre,


María ;)

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Todo este tiempo.


Todo este tiempo he estado ausente, tratando de buscar una solución a los problemas que ahondan dentro de mí. Sé que hay diferentes tipos de problemas con diversos grados cada uno de ellos, y esto para mí está suponiendo un problema porque me está restando tiempo de tranquilidad, de ocio y de trabajo. Algo para mí se convierte en un problema cuando no lo soluciono en el momento.

Quise vivir demasiado rápido, quise sentir con apenas 20 años lo que otras personas sienten con casi 40. Y lo conseguí, conseguí mucho en poco tiempo. Conseguí sentirme respetada, querida y valorada, trabajé duro, muy duro por llegar donde estoy, pero... ¿y ahora qué? Soy la misma que ese día decidió rellenar una ficha, la misma que todos y todas vosotras habéis rellenado cuando habéis entrado a formar parte de esta gran familia.

Me he sentido querida dentro de ella. Querida por unos y odiada por otros, pero nunca he pasado indiferente. El otro día tuve una de mis mejores intervenciones, de esas en las que no hace falta papel porque todo sale solo, y sale solo porque se siente sin necesidad de pensarlo. Hablé de la Igualdad y de lo importante que es creer en ella, en que mujeres y hombres somos la misma cosa y venimos del mismo lugar, hablé de la necesidad de sentirnos libres, valoradas y respetadas, hablé del tú a tú, sin tapujos y sin alturas de mira. Hablé de nosotros y nosotras, de la vida, de lo que siento y de que podemos llegar tan lejos como queramos porque lo imposible sólo tarda un poco más.

Antes de comenzar mi intervención le comentaba a una compañera que necesitaba darme un respiro así como vivir mi propia vida. Le dije que necesitaba irme lejos para poder vivir nuevas experiencias necesarias en mi vida. Ella me pidió que no lo hiciera, que aquí me necesitaban, que era importante y podía ser útil. Pero he estado pensando algo, y es que yo siempre he estado cuando se me ha necesitado y cuando no, y ahora soy yo la necesita distancia, lejanía y tiempo para pensar. 

No sé cuanto tiempo tendrá que pasar para que pueda devolverle a esta organización todo lo que me ha dado, formación, aprendizaje y algo muy importante, grandes amigos y amigas. Esto no es un adiós, es un hasta pronto. 

Borja, Ruth, Cristina, Soraya, Julio, Juanra, Rubén, Carlos, Alberto, Alba, Cristóbal, Cristina, Andrés, Emilio, Chuso, Raúl, Santi, Pablo, Luis etc... Gracias por todo. 

Sólo me queda decir algo, y es que prometo que algún día volveré. 

lunes, 5 de noviembre de 2012

Mirando al horizonte.


Hoy ha sido un día intenso, lleno de magia, de emociones, lleno de recuerdos... Hoy de nuevo he sentido lo que era la felicidad, la sensación esa que corre por mi cuerpo y me dice "siéntete libre". Hoy... ha sido un día especial, uno de esos días que aunque el tiempo pase no se olvidan.

Detrás de cada persona y su simple físico se encuentra todo lo demás, se encuentra lo que cada uno y cada una somos. Y yo soy esa chica de la "sonrisa permanente" para quiénes me conocieron en esa semana de mi vida que ha hecho que ahora mis prioridades se redefinan. Para el resto soy María, María Núñez para ser exactos. Puedo ser una María más, o no, pero soy lo que veis, transparente, espontánea, descarada, sincera  y arrogante en ocasiones si a valentía esto se asemeja. 

Hoy he cumplido esa misión que tenía pendiente, la que no podía dejar escapar. Me habría arrepentido toda una vida de no haberlo hecho. No voy a perder una sola oportunidad de todas las que se crucen en mi camino. Sí, sé que tendré que elegir a veces entre varias opciones pero para eso existe la palabra "prioridad", que además de ser palabra, también es hecho. 

Hoy Marcelo me ha enseñado algo muy importante y es a seguir creyendo en mí misma, a no dejar que nadie rompa mis sueños y que no acaben con mis ilusiones. Me ha dicho que el tiempo no espera por nadie, y es cierto. Seamos amigos y amigas del tiempo y no nos convirtamos en lo contrario.

Mientras miraba el horizonte, ese gran horizonte azul, esperaba su llegada... No sabéis lo que sentí cuando lo vi llegar. No os imagináis que cantidad de recuerdos se apoderaron de mi. Sentí que me enamoraba porque ese cosquilleo se apoderó de mi estómago y los nervios se convirtieron en sus mejores aliados. 

Lloré de la emoción, reí de felicidad y terminé teniendo una conversación frente a él. Sólo hablábamos ella  y yo, mientras, él nos escuchaba atento, en silencio y mirándonos fijamente. Él dejó huella en nosotras, nosotras allí dejamos parte de nuestra historia, como dice Marcelo, pedazos de nuestra vida.

Gracias y hasta pronto AMIGO.

domingo, 14 de octubre de 2012

El paraíso de las olas.


El leve susurro de las olas del mar, el balanceo de un barco que está a kilómetros de la iluminada ciudad de Madrid, sintonías semejantes, público desconocido... Recuerdos en la retina, en los sentidos, en el corazón... Señales, momentos, personas, 3, 2, 1... Acción.

Mentiría si dijera que no le echo de menos, que toda la música que escucho no me recuerda a él... Mentiría si dijese que he vuelto a ser la de siempre, la de la sonrisa permanente, la que acepta los retos del destino... Mentiría si dijese que me he rendido, que lo doy todo por perdido... Y mentiría si dijera que parte de mi no quedó allí, en aquel lugar, en tierra de nadie, en el paraíso de las olas, en el amanecer del mar, en el atardecer de los surcos que se veían desde la proa... 

Un lugar, una persona, cuestión de momentos... Fue cosa de la magia. Muchos quedaron allí alguien especial, yo me olvidé mi corazón.


viernes, 12 de octubre de 2012

Aun recuerdo.


Aun recuerdo aquél día en que la vida comenzaba a cambiarme sin yo apenas darme cuenta de ello. No puedo recordar el momento exacto en que ocurrió, pero sé que ocurrió. Me propuse cumplir unas metas y las alcancé... Y es que quiénes me conozcáis, sabréis que no me gusta dejar las cosas a medias y que cuando me propongo algo lucho hasta el final, hasta conseguirlo o hasta que el "basta" no proviene de nadie en concreto sino del destino.

Pues bien, no sabría deciros, pero en las últimas semanas estoy sintiendo que las cosas cambian, y que he llegado de nuevo a un punto de inflexión importante. Ahora he de decidir, aunque antes de decidir debo aprobar esos 50 créditos que me quedan para acabar mi carrera... (Por fin...)

El punto de inflexión no está del todo relacionado con que sea el principio del fin de una etapa en mi vida, sino con haber sentido la necesidad de replantearme lo que antes jamás me había parado a pensar: ¿Hacia dónde quiero ir y con quién?

Hay señales que el destino nos manda, oportunidades que se cruzan en nuestro camino y personas que aparecen como por arte de magia, quizás para quedarse, o quizás para no hacerlo, pero que a fin de cuenta nos marcan con el mero hecho de tan sólo haberles conocido. Lo cierto es que no sé si apareció para quedarse (miles de millas en este momento lo impiden) pero lo que sí sé, es que apareció para hacerme ver algo importante: Y es que la felicidad la creamos nosotros y nosotras mismas con nuestra adecuación a una forma de vida. 

La Libertad (ese gran derecho consolidado o al menos reconocido desde hace tiempo) nos permite poder elegir. ¿Y sabéis qué? Elegiré, y no sé si me equivocaré o si no lo haré, pero elegiré desde lo que mi conciencia y mi corazón me dicten, y podré sentir que lo hice porque realmente lo sentía, sin imposiciones ni lamentaciones, y sin tener que arrepentirme toda una vida de lo que pude haber hecho y nunca hice...

Mil besos... y hasta pronto, no sé cuando, pero hasta pronto.

María.

jueves, 4 de octubre de 2012

"Hay una cosa que te quiero decir"



Cierro los ojos y me vienen a la mente infinidad de recuerdos... Recuerdos que son vivencias, nuestras, vuestras, de ellos... Si ese barco hablase... Si de verdad hablase no sé que podría ocurrir. Pero llegan momentos en los que sobran las palabras, sobran los motivos... Hay miradas que lo dicen todo, y dicen tanto que pueden determinar hasta los latidos del corazón.

Como decía Nino Bravo: Más allá del mar habrá un lugar donde el sol cada mañana brille más... (...) las penas pesan en el corazón...

He podido conocer a una persona maravillosa que en cuestión de días me ha transmitido lo que nunca antes nadie había sido capaz de hacerme sentir. He pensado con el corazón y he sentido con la cabeza. He apreciado lo bueno, lo auténtico, lo sincero... Y a pesar de que está lejos le siento cerca, soy capaz de saber lo que siento, lo que quiero... 

Ayer recibí una llamada que hizo que algo se me removiese dentro de mi. Sentimientos, sensaciones, no sé exactamente explicar qué era, pero era algo especial, algo que salía de dentro, sin necesidad de pensar, sin necesidad de saber de qué se trataba... Sonreír y llorar a la vez, sonrisas y lágrimas, lágrimas y sonrisas...

La incertidumbre me lleva a pensar: ¿Estará pensando en mí? ¿Sentirá la misma necesidad de tenerle cerca? ¿Me extrañará...? 

Hoy al despertarme había recibido un mensaje, y sí, era suyo. Me hizo feliz de nuevo. Le recuerdo, le extraño, le echo de menos... Necesito tenerle cerca. Con su música, son sus sonrisas, con sus buenos días y sus buenas noches, con sus dedicatorias de canciones y su tierna voz. 

Ahora sé que sería capaz de dejarlo todo por amor. Y sería capaz porque esta necesidad de hacer realidad un sueño, que no es otro que el de ser feliz, el que me lleva a entender lo que se siente cuando tienes delante a esa persona. No se piensa en obstáculos sino en metas, tampoco en negativo sino con optimismo. Miles de millas de distancia... pero ¿y qué? ¿Y si el me quiere? ¿Y si siente lo mismo? No me gustaría saber que el tiempo ha pasado y que no lo he intentado... 

Todo me recuerda a él... la música, las imágenes del barco... Es capaz de aparecer cuando menos me lo espero, y ahí está, haciéndome sonreír a pesar de estar a cientos de miles de kilómetros. Él en el mar, yo en la tierra... pero ambos espero que sobre una nube.

Te estaré esperando...

María. 

martes, 2 de octubre de 2012

Valió la pena.


Decidí vivir esta experiencia con intensidad, sin pensar en "el que dirán", he tratado de exprimir al máximo cada momento, y lo he conseguido. Ahora siento que me falta algo... algo que he podido tener estos días, algo llamado Libertad. 

Pensaba que sería un viaje más... pero no, ha sido "El viaje". Legendario, único, irrepetible e insustituible. Ha sído lo más parecido a la felicidad que he vivido nunca. 

Me replanteo mi vida, mi futuro. No sé si estoy siendo lo que realmente quiero ser. Toca esperar que llegue junio y decidir, decidir sobre lo que siento, sobre lo que quiero y sobre lo que soy. Me va a tocar decidir entre el "ser" y el "deber ser", y creo que llega el momento, de elegir "el ser", porque el "deber ser" ha sido hasta ahora.

Quienes me conozcáis, sabréis a lo que me refiero. Estoy constantemente inmersa en la vida política y en todo lo que la rodea y me olvido de que tengo algo llamado vida, la cual tengo algo apartada. No sé si merece la pena hacer lo que hago, pero va a llegar el momento de poner un punto y a parte a esta vida de desenfreno, para ser lo que mi corazón me dicte, y para escuchar esa voz que me susurra al oído instándome a que sea feliz, o al menos que lo intente.

Desde la habitación R12 situada en la planta cuarta... les doy las buenas noches.

María. 

lunes, 1 de octubre de 2012

Con aires de Libertad en alta mar.


El pasado lunes 24 de septiembre me embarqué -y nunca mejor dicho- en la que será una de las mejores experiencias de mi vida. En este caso no sólo se trataba de visitar un país que no conocía como es Italia. Se trataba de poder sentir la esencia de la Libertad, la más pura esencia de la propia Libertad.

Estaba desconcertada a la vez que entusiasmada y algo asustada. No sabía como reaccionaría pues nunca había "vivido" en un barco durante siete días. El viaje de Olivenza hasta Valencia fue duro y largo, y cuando al llegar al puerto vi ese gran barco, el "Grand Celebration" sentí un cosquilleo que me hizo alegrarme.

Embarcamos, colocamos la maleta, dimos un paseo por el barco para conocerlo, nos perdimos... y decidí que llegaba el momento de comenzar a probar las instalaciones comenzando por el jacuzzi en la cubierta número 10. He de reconocer que si ahora cierro los ojos, puedo visualizar hacia donde se dirigen la mayoría de los eternos pasillos del Grand Celebration. 

A veces no sólo el lugar es lo que importa sino la compañía y yo he tenido a mi lado la mejor. La primera noche, en la cubierta, se convirtió en el comienzo de algo importante: la amistad entre desconocidos y desconocidas, que a pesar de no saberlo, comenzarían a ver como sus vidas cambiaban. 

El "todo incluido", lo que suponía un mito para nosotros, se hizo realidad. Camareros que el segundo día se sabían nuestro nombre debido a que cerrábamos todos y cada uno de los bares y discotecas del barco, y el cariño de una tripulación que se ha convertido en esta semana, en más que una familia para nosotros y nosotras.

He sido feliz. He sido yo misma, transparente, alegre, amable y sociable. He tratado de exprimir esta gran experiencia desde el segundo uno y creo que lo he conseguido. Teatro, Conciertos en directo, reportaje de fotografía, casino, cafés frente al mar, jacuzzi y piscina en la cubierta de un barco maravilloso y un personal que en todo momento nos atendía. 

Pude pedir mis deseos en la Fontana Di Trevi, visitamos el Coliseo Romano y el Parthenón, la ciudad del Vaticano (aunque decidí hacer una sentada a lo 15M y no entré en la basílica de San Pedro) y he podido tocar la historia con las manos visitando las Ruínas de Pompeya. 

¿Pero sabéis qué? Que a parte de la experiencia de poder vivir en alta mar y marearme incluso cuando el mar estaba revuelto, lo que me llevo es el cariño y la atención de las personas que han estado pendientes cada minuto. Ransés, mi prima por supuesto, Rubén y Javi, Alberto, Andrea y Magdalena, y como no, Jose. Mi gran compañera de cafés y charlas políticas, Esther, y por supuesto Javi y Juani por haber estado pendientes cada instante. 

Y además, estoy segura de que nada será lo mismo en ese barco sin nosotros. Está claro que el crucero continúa, pero nadie será capaz de instaurar la alegría y la transparencia en cada baile, cada sonrisa y cada palabra que nosotros tan amablemente regalábamos a quienes hacen posible esa experiencia que son los y las trabajadoras incansables del Grand Celebration.

Os dejo con la que ha sido la última canción de esta gran aventura... ha sonado hoy, a las 3 de la tarde, y ha sido ahí, cuando he apartado la dureza que durante el día de hoy me acompañaba, para dar paso al sentimiento que me produce el saber que he conocido gente maravillosa a la que no podré tener a mi lado todos los días. 

Siempre nos quedará el champán, la ginebra con limón, el san francisco con tequila, el red lavel cola y el suministro de bebidas a las 3.30 para no quedarnos sin provisiones... Siempre nos quedarán esas copas después de las pizzas en el Fuencarral, las prácticas en inglés con desconocidos, los bailes en la pista, las miradas que sustituyen a las palabras, la fiesta de disfraces en la cubierta número 10, el resplandor de la fiesta ibicenca en la noche que el barco más se movía y por supuesto...siempre nos quedará cerrar "La Alameda" a las 4 de la madrugada...

Ahora, el Grand Celebration estará partiendo rumbo a Italia, mientras tanto, nosotros recuperamos nuestra vida, comenzamos nuestra rutina y recordamos esta gran aventura, que para mí, ha sido más que eso.

"Me voy pero te juro que algún día volveré..."

Gracias, y hasta pronto.

María Núñez.

viernes, 21 de septiembre de 2012

Aquél 14 de Abril.


Hace apenas horas ha fallecido el que fuera una de las grandes figuras políticas de la Transición y precursor de la llegada de la Democracia a España, Santiago Carrillo. Combatió al Franquismo, no se inmutó cuando Tejero entró en el Congreso de los diputados aquél 23 de febrero del 81 a punta de pistola y tampoco lo hizo cuando tuvo que defender los intereses de la izquierda durante la postguerra. 

No se me olvidará aquel  14 de abril de 2011 en que su hijo, José Carrillo, ganaba las elecciones a Rector en la Universidad Complutense de Madrid. Ese día, mientras finalizaba el recuento y lo veía con mi madre, yo le comentaba la importancia de que en los tiempos en los que nos encontramos, Carrillo se convirtiese en Rector de una de las Universidades más importantes de toda España. Ese día lloré de emoción, al igual que imagino lo haría Don Santiago. 

No puedo negaros que sin conocerle le tenía afecto, cariño y admiración. Me recordaba mucho a mi abuelo, a su lucha por la democracia y sobre todo, a sus ganas de vivir hasta el último segundo de vida. 

Desde el ala derecha de este país siempre se ha acusado a Santiago Carrillo de asesino, de haber ordenado la matanza de Paracuellos. Lo cierto es que le culpan de algo que el no cometió. Ayer, en una entrevista que le habían hecho hacía unos años -no recuerdo si meses- cuando le preguntaron por esta cuestión, el mismo afirmó que nada había tenido que ver con tal masacre. Además, tan elegante como siempre dijo que no había sido él quién había ordenado la matanza, que conocía el nombre de la persona que lo hizo, pero que por respeto a su memoria y dado que no podía defenderse porque había fallecido, no diría su nombre delante de las cámaras. 

Este señor, ha tenido que cargar con una cruz que no le pertenece. Pero su conciencia estaba tranquila a pesar de lo que dijesen y digan de él quiénes no han sabido apreciar la gran labor que ha realizado en nuestro país y fuera de él. 

Hace apenas dos días pude ver a Santiago Carrillo por primera y última vez en mi vida. Con la bandera del Partido Comunista a los pies del féretro, y con una mano sobre la otra, sus gafas perfectamente colocadas y su semblante serio pero a la vez cercano. Parecía como si estuviera dormido pero lo cierto es que ya no podía escucharnos. Aun así, transmitía una paz y una tranquilidad abrumadoras, las mismas que en los últimos tiempos. 

El que fuera el Secretario General de las Juventudes Socialistas y posteriormente Secretario General del PCE se ha convertido en un referente para la historia, para los mayores y los no tan mayores, para la juventud y marcará la historia que nuestros hijos y nuestras hijas conocerán de primera mano. 

Mis hijos siempre sabrán quien fue Santiago Carrillo, les hablaré con ternura de él, y les diré que gracias a este señor y a la labor de otras muchas personas, la Libertad se constituyó en un derecho primordial para la ciudadanía Española. 

Él siempre quiso que la Izquierda luchase en conjunto, que acercásemos posturas y espero, que algún día, de nuevo, y a pesar de las diferencias existentes entre nosotros y nosotras, podamos llegar a comprender que la Izquierda cuando está Unida jamás podrá  ser vencida. No pretendo acabar hablando de vencedores y vencidos, quiero hacerlo hablando de la memoria. Por eso, quiero decirle desde aquí Don Santiago, que usted fue pasado en nuestras vidas, antes de haber nacido, fue presente mientras vivió y será futuro en nuestra memoria.

Gracias, y hasta siempre COMPAÑERO.

María Núñez.

lunes, 17 de septiembre de 2012

La estrella de los tejados.


Si hoy fuera mi última entrada del blog tengo claro de lo que no hablaría, pero no sabría deciros cuál sería el tema estrella de mi post. O sí, realmente si sé de que hablaría, de todo aquello que me hace sentir especial. Y me siento especial cuando tengo alrededor personas que me quieren, que me transmiten sus deseos, experiencias y sensaciones varias. Me siento feliz hablando con la gente, escuchándoles, entendiéndoles, y en la medida de lo posible, ayudándoles. Para mí hablar de Madrid y de Olivenza, supondría hablar de dos lugares emblemáticos e imprescindibles en mi vida. Lugares donde he crecido como persona y he alcanzado parte de mi felicidad. 

Y os preguntaréis que supondría hablar de Política... Hablar de Política, eso sí, con mayúsculas, supondría llegar al estado pleno de madurez. Ese, en el que he sentido lo que era ser libre, en el que he aprendido qué suponía la Igualdad y donde he conocido a quiénes probablemente, me estén enseñando mucho de lo que sé. He conocido lo que supone ser libre y lo que no, lo que significa el compromiso y la responsabilidad, pero sobre todo, he aprendido que cuando algo está de color negro es porque existen motivos para darle otro tono que tenga más luz para desprender. 

Hoy, mientras paseaba con un amigo por las calles de Madrid, hablábamos del sentido de la libertad y de lo que ésta supone para nosotros. Tengo algo claro, y es que si algún día tengo una hija -que espero que sí- el nombre que elegiré para ella será Libertad. ¿Y sabéis por qué? Porque para mí la Libertad supone el estado de todas las cosas; de la Igualdad, de la Responsabilidad, del Compromiso, del Cariño, del Amor, la Familia y la Fraternidad. Para mi, hablar de Libertad supone hablar de vida. Una vida que brille porque tenga luz propia, y eso, sólo puede ocurrir si alguien actúa bajo la responsabilidad y el compromiso de ser completamente libre. 

En un momento como este en el que la situación política y económica es cuanto menos desgarradora, hablar de Libertad puede parecer una utopía. Pero no lo es. La ciudadanía ha salido a las calles, con sus banderas, expresando lo que sienten y lo que quieren, y condenando lo que no quieren. Ante las injusticias del momento, las calles se llena de mensajes, de palabras, se llenan de libertad... sin armas. Sin más arma que el poder y el valor de la palabra. Dejemos pues que cada uno y cada una se sienta libre para poder expresar lo que atañe a sus necesidades, a sus sentimientos, y a sus Comunidades. Las particularidades de España son las que la hacen ser única e irrepetible, y no se trata de romper un país sino de todo lo contrario, cuando en masa miles de ciudadanos y ciudadanas deciden que quieren reivindicar lo que consideran que les pertenece. A día de hoy, no es un crimen querer ser libre, querer ser lo que realmente somos, sin imposiciones, sin lamentaciones y en condiciones de equidad.

Hoy ha sido un gran día, he podido compartirlo con gente a la que quiero, personas que me transmiten sensaciones que no se pueden expresar con palabras. Y quiero compartir con vosotros y vosotras, una canción que representa perfectamente mi estado de hoy. 

Gracias... Madrid ;)

María Núñez.

sábado, 15 de septiembre de 2012

Cercanía en la distancia: #15S

En un ambiente propicio, con una copa de Rioja de por medio, trataré de hablaros de algo que para mí es realmente importante: La cercanía en la distancia. Os preguntaréis que quiero decir con esto, y puedo aseguraros que no es complicado entender el significado de ambas palabras cuanto menos antagónicas.

Anoche miles de ciudadanos y ciudadanas de este país así como personas implicadas verdaderamente con esta sociedad salieron de sus casas con ilusiones, con confianza pero sobre todo con esperanza. ¿Y sabéis por qué? Salieron con esperanza porque creen que aun pueden cambiar las cosas si se hacen verdaderamente bien y atendiendo a las verdaderas razones y al verdadero fin por el que deben hacerse que es la sociedad en su conjunto y la ciudadanía en particular. Salieron con confianza, con la confianza de saber y de sentir que ellos y ellas también forman parte de esta sociedad y que mucho tienen que ver en el transcurso de la misma. Pero sobre todo, salieron con ilusión. Sí, con la misma ilusión con la que un niño o una niña abren sus regalos el día de Reyes esperando que les llegue lo que han pedido. Y bien, ¿qué hemos pedido? -os preguntaréis ahora-. Hemos pedido tener una clase política a la altura de la circunstancias, estudiantes que despierten y sean capaces de movilizar a sus compañeros y compañeras en la Universidad -que es donde comienza la Política de verdad-, pensionistas que dejen de creerse que el gobierno toma decisiones obligado por el pasado que relacionan directamente con Zapatero y por encima de todo, hemos pedido que toda persona sea cual sea su condición sexual, su condición laboral o condición geográfica se sienta en libertad de decidir y transmitir que las injusticias no son injustas sólo porque carezcan de un fin justo, sino porque el proceso que se haya llevado a cabo tampoco fuese el adecuado.

Hoy, en las calles de Madrid he visto ILUSIONES, CONFIANZA Y ESPERANZAS. Hoy he visto a más de un millón de personas diciendo "NO" a las injusticias y a las desigualdades sociales. Hoy, he podido sentir de cerca la diferencia existente entre la hija de un marqués y la hija de un obrero. La hija del marqués no estaba pasando calor, perdiendo su voz y sus fuerzas por defender sus derechos como ciudadana, pero la hija del obrero, estaba demostrando que tiene capacidad, que tiene valentía y que tiene valor para enfrentarse al cacique mayor del reino para defender la causa más justa. 

La manifestación de hoy no se me va a olvidar nunca, ya no sólo por el calor o el sacrificio que han hecho miles de españoles y españolas por estar hoy en Madrid, sino porque he recordado, entre Política de calle, entre compañeros y compañeras, y entre "causalidades de la vida" lo es que volver a encontrar ciertas sensaciones olvidadas en un baúl de los recuerdos.

Cercanía en la distancia... En la distancia del momento, en la distancia de los besos... Distancia en la cercanía de la mirada. A veces, sobran las palabras. Hoy, es uno de esos días.


María Núñez.

sábado, 25 de agosto de 2012

Todo pasa y todo queda.


Nuestro camino lo marcamos nosotros y nosotras mismas a diario. Somos quiénes decidimos qué es lo que queremos hacer y lo que no, y lo hacemos cada día, a base de actitudes y decisiones, a base de comportamiento, a base de ser quién realmente somos.

Veréis, hoy quiero hablaros de algo que es muy importante para mí. Quiero hablaros del "Antes" y el "Después". En este caso, podría establecer un "después" desde que cumplí 18 años y tuve que "independizarme" al irme a estudiar fuera. No me equivoqué con la carrera, al contrario, cada día estoy más convencida de que acerté, no me equivoqué al escuchar a mi corazón y seguir mi conciencia, y tampoco a quiénes me dieron un único consejo: El de hacer lo que realmente fuese a hacerme feliz y con lo que de verdad me sintiese realizada como persona. 

Estas semanas que he estado desconectada he llegado a pensar en todo. A veces creo que pienso demasiado, pero no dejo de hacerlo. Las noticias en el telediario no son precisamente las mejores en los tiempos que corren, desfalcos de dinero, imputaciones, condenas, injusticias... y millones de españoles y españolas que tienen el agua al cuello desde hace meses. 

Las "mujeres del gobierno" (Soraya Saez de Santamaría, Fátima Báñez y Ana Mato) han salido hace un par de días a dar una rueda de prensa para hablar de la ayuda de los 400 euros a los parados de larga duración. La conclusión a la que llego tras haberlas escuchado es que según ella cobrar ese dinero -que para muchas personas es el sueldo de un mes para mantener a toda una familia- es un favor que el gobierno hace a los españoles y españolas. Además, llego a otra conclusión, y es que si eres joven, te habías independizado, pierdes tu trabajo y vuelves a casa con tus padres porque no puedes pagar el alquiler de tu piso y cobras ese dinero, a tus padres les será descontado no sé qué cantidad porque tú estás en  casa.

Cuanto menos, me parece injusto. 

Además, tengo entendido que el famoso Plan Prepara que debería haber servido para formar a los parados y ofrecerles la oportunidad de trabajar, tan sólo ha hecho que 6% de los desempleados de este país volvieran a encontrar un trabajo. 

No sé en qué se ha convertido mi país de un tiempo a esta parte. Es de risa, de chiste, de pan y de circo. Robos en grandes almacenes porque la gente no tiene para comer (no estoy justificando la ingrata actitud de Sánchez Gordillo), engaños constantes del gobierno hacia la ciudadanía española, dejadez en parte por parte de la oposición y bajo mi punto de vista escasas y blandas manifestaciones verbales  en contra, 

Considero que nos perdemos muchas cosas por no hablar a tiempo, y lo que más perdemos es la confianza de la gente. Esa confianza que Zapatero recuperó desde 2000 hasta 2004 y que hizo que este país fuera líder en otorgar derechos y oportunidades. Y perdemos ilusión, ya no sólo por parte de la ciudadanía sino por la nuestra propia. 

En estas semanas he tenido esas dos palabras en mente: Ilusión y Confianza. Ilusión para conseguir que la mecha siga viva, y confianza para mantenerla más viva que nunca. 

"Todo pasa y todo queda", pasa el desencanto, la desconfianza... queda el sentimiento de querer hacer las cosas bien y de servir a todo un pueblo. 

Estoy segura de que cuando  Serrat adaptó el poema de Antonio Machado para hacerlo suyo como canción pensaba en lo que éramos y en lo que somos, en el camino que hay que recorrer para poder hablar de un antes y de un después. Por eso, a pesar de que en ocasiones mandaríamos al garete todo esto de la "política", vuelve a llegar el día en que encontramos las razones por las que un día llegamos hasta aquí. Y es que no hay nada más gratificante que sentir que lo que haces afecta positivamente a los y las ciudadanas, a tu gente.

María.

miércoles, 22 de agosto de 2012

Tengo un sueño: La República.


En su mirada queda reflejada la seguridad, el coraje y la valentía propias de una mujer.

Elegir con el corazón era la única libertad de la que una mujer de la época de Alfonso XIII y anteriores pudieran disfrutar. Pero aquel 12 de abril de 1931, tras la victoria de los republicanos en las elecciones, llegaron nuevos tiempos de cambio y de derechos para quienes habían sido olvidadas como ciudadanas y habían estado renegadas a una segunda posición a la sombra de sus padres, maridos e incluso hijos. 

A veces tenemos que sacrificar muchas cosas para poder perseguir un sueño común que nos afecte a todos y todas. La República fue ese sueño con el que soñaban a diario los padres y las madres para sus hijos, las mujeres para sus derechos y libertades, y los obreros para mejorar sus condiciones laborales. Ese sueño se cumplió a pesar de los obstáculos, de los frenos impuestos y de las rebeldías avenidas desde ese lado de la izquierda que no entendía que la violencia no era el camino para alzarse con la Libertad y la equiparación igualitaria de derechos. 

España se acostó monárquica aquel 11 de abril de 1931 y se levantó republicana en la mañana del 12 de abril de ese mismo año. El rey acabó abandonando el país y el 14 de abril de 1931 fue proclamada la II República Española. 

El camino no fue de rosas sino todo lo contrario, pero en España se crearon más de diez mil colegios públicos durante la República, la mujer pudo sentir que su sexo no suponía un obstáculo para la igualdad y Clara Campoamor convenció con su don de la palabra, su coraje y su valentía a la mayoría de la cámara del Congreso de los Diputados, lugar en el que años después entrarían a formar parte decenas de mujeres. 

Mi bisabuelo fue uno de esos alcaldes republicanos de una de las villas más bonitas y con más historia de todo el país: Olivenza. Cuando no tuvo otra escapatoria entregó el pueblo al que había estado sirviendo durante un tiempo con la única condición de que no se derramase ni una sola gota de sangre. Pero fue ingenuo, hizo lo creía que tenía que hacer, porque el no haría jamás a nadie lo que no le gustaba que a el le hicieran. Hizo lo correcto, lo que le dictó su conciencia pero también su corazón, hizo lo que creía que era mejor para su pueblo y los y las ciudadanas oliventinas. Le mintieron, si hubo sangre. Los concejales socialistas no fueron perdonados y las entradas y salidas de las casas de madrugada se convirtieron en un calvario difícil de olvidar. Por ese entonces él estaba en Ocaña, en la cárcel. Ese era el precio a pagar por haber servido a la República y a su pueblo. Pero no se rindió. Su carácter permaneció intacto, su valentía siguió viva y sus ideales no han muerto porque yo he prometido no dejarlos de lado. 

Perdonar si este tiempo la decepción y el desencanto se han hecho eco en mí. Necesitaba el tiempo oportuno para saber qué soy y qué quiero ser. Necesitaba una señal, un motivo y una razón para creer. Los he encontrado y ellos jamás me perdonarían dejar este camino a medias.

Por Olivenza, por la República y por la memoria de quienes sacrificaron toda una vida pensando en que sus hijos y nietos pudieran vivirla como a ellos les hubiera gustado. 


María.


martes, 21 de agosto de 2012

Nada es para siempre.


Hoy un compañero de ideas y partido me ha dicho por twitter que mis últimas entradas en el blog eran demasiado "lights". Lo cierto es que necesitaba tomarme un tiempo para mi. Necesitaba evadirme de la política al menos por unas semanas o un par de meses. Ha sido un año complicado y en lo político he pasado de tenerlo todo a no tener nada. Bueno, nada no, ahora tengo mucho más. Tengo la suerte de formar parte de la Comisión Ejecutiva Regional de Juventudes Socialistas de Extremadura y además, tengo el placer de poder compartir tiempo con grandes personas a las que admiro.

Este es mi último año de carrera. El tiempo ha pasado rápido. Echo la vista atrás y me doy cuenta de todo lo que he aprendido. Aprendí a escuchar y tolerar opiniones diferentes, a reforzar mis convicciones, -que no nos equivoquemos, son mías, propias, moldeables con todo lo que ocurre cada día, pero a fin de cuentas mías y no impuestas- y sobre todo, a saber que es lo que no quiero ser. 

Cuando empecé la carrera tenía miedo a viajar sola. Aprendí a hacerlo, y no es sólo que aprendiese, sino que ahora disfruto cuando lo hago. Me siento libre, independiente, siento que soy la mitad de lo que quise ser. Y quiénes me conozcáis, sabréis por qué digo sólo la mitad. 

Me pongo a pensar y mi mente no para nunca, sigue dando vueltas y vueltas, como algo parecido a una noria. Hace un par de veranos subí al London Eye -¿ya hace dos años que estuve en Londres? ¿véis? El tiempo pasa muy rápido, demasiado rápido- y pude ver desde arriba la mitad de Londres. La otra mitad era imposible alcanzarla con tan sólo una mirada. Pues eso soy, la mitad de lo que quise ser. La otra mitad ya llegará. 

En Sevilla conocí a buenas personas, me quedo con Paola, Patri, Adriana, por encima de todo, y recuerdo mis grandes momentos con Rafa y Ricardo en los Bermejales. Más tarde llegaron el resto. Llegué a Madrid cargada de sueños y este año trataré de cumplirlos. En Madrid siempre tengo cosas que hacer y que contar, paseos por la ciudad en buenas compañías, reencuentros, segundas oportunidades... El pasado, fue un curso completo y este año me faltarán dos grandes amigas, Ruth y Alba, pero sé que la distancia no va a ser un impedimento. Víctor es como mi hermano mayor, siempre pendiente, a pesar de que él también tenga cosas de las que preocuparse. Está cuando le necesito, y cuando no, está siempre.

Pablo tiene algo que ver con eso que os digo de las segundas oportunidades, y Borja. Ambos son mis amigos -muy buenos por cierto- porque supe que tenían mucho que enseñarme. Emilio y su ilusión, Chuso y su fortaleza, Raul y su protección y necesidad de hacerme sentir bien; de Santi aprendí mucho (aunque creo que no esperaba verse por aquí), sobre todo a que si piensas que algo es de una manera, hay que ir hasta el final. Llegó un momento en el que discrepamos, pero cada uno siguió el camino que creía correcto. No fue ni mejor ni peor, tan sólo diferente, pero reconozco que lo pasé mal. 

De Soraya y Julio aprendo a diario, ellos están ahí siempre que les necesito. Me ilusionan, me contagian, me inyectan energía y ganas de seguir hacia adelante. Porque este es nuestro camino. Es el camino del progreso, de la Igualdad, de la Libertad y de la Justicia. Justicia por la que un día Garzón luchó desde su cargo, Igualdad que un día persiguió Clara Campoamor dándonos a las mujeres la oportunidad de sentirnos como nuestros padres, maridos, hijos, abuelos... y la Libertad que un día Miguel Hernández y Lorca convirtieron en versos. Libertad por la murieron, Libertad que les fue arrebatada... 

Nada es para siempre... pero cuando tienes un amigo de verdad, es para toda la vida. Los buenos amigos son como las ideas, si son de verdad, nunca se olvidan.

María.

sábado, 11 de agosto de 2012

Cuestión de recuerdos.



Sentir la extraña sensación de querer y no poder, ser o no ser, sí o no. 

La vida es una continua batalla en la que hay que tomar decisiones, y he de reconocer, que a día de hoy aun me cuesta decidir entre blanco y negro.

Hoy he estado meditando sobre si todo esto merece la pena. He pensado en la necesidad que me embauca desde que tengo uso de razón. He sentido la necesidad de ser feliz. Me aterra si quiera el hecho de pensar en la eterna soledad. Tengo miedo a pensar que no podré vivir la vida que quise tener o el no poder sentirme realizada como persona al lado del chico de mis sueños, como ocurre en las pelis de Disney.

Hoy he echado de menos muchas cosas, he comenzado a desahogarme y he tratado de despojarme de recuerdos que ya solamente son eso, recuerdos. 


viernes, 10 de agosto de 2012

Una estrella fugaz... Pide un deseo.



Cuando pasa una estrella fugaz tenemos por costumbre pedir un deseo... ¿pero y cuándo no pasa? ¿lo pedimos también? Si habéis visto alguna vez pasar una estrella fugaz y no habéis pedido un deseo, puede que la vida os entregue una nueva oportunidad de hacerlo... Entonces, ese será el momento.

Desde que un deseo se pide hasta que se cumple, es probable que transcurra un largo espacio de tiempo, incluso, es probable que nunca llegue ese momento, pero es cierto, que la vida se compone de segundas oportunidades. Estoy contenta porque a mi me ha brindado una segunda oportunidad y la estoy aprovechando. 

Probablemente, si hace una semana hubiera desestimado una invitación, ahora no estaría escribiendo sobre esto. El caso es que es preferible arrepentirse de lo que uno hace a hacerlo de uno no hace. En este caso, lo hice y no me arrepiento sino todo lo contrario.

Es curioso como a veces podemos llegar a ser tan sumamente naturales con personas que como "aquél que dice" hemos conocido hace poco tiempo. Si he de seros sincera, creo que eso ocurre porque realmente todo empezó hace mucho... 

"... y justo entonces intentas recordar en qué momento comenzó todo y te das cuenta de que empezó antes de lo que pensabas... mucho antes..."

Siento la extraña sensación de que se ha marcado un antes y un después en mi vida... no puedo explicar con palabras cómo ni por qué, pero es una realidad constatable. Y pensar ahora de lo mucho que me estaría arrepintiendo... Fue una señal, estoy convencida.

Podría escribir más... mucho más, pero prefiero mantener en silencio las razones. Y es que... Hay razones del corazón que la razón no entiende... aunque este será nuestro secreto =)

Imagina que pasa una estrella fugaz mientras observas las estrellas en una noche de verano, cierra los ojos, y pide un deseo... no lo pienses, mejor siéntelo.

Buenas noches... y espero que se cumpla.

María.

lunes, 6 de agosto de 2012

Señales.

A veces la vida te pone en el lugar y el momento exactos para introducir cambios en ella para siempre. He de reconocer que estoy feliz pero a la vez algo triste. 

He estado en Valencia diez días, fui a aprender inglés y vengo cargada de vivencias. He pasado seis días hablando inglés durante casi ocho horas seguidas y ahora podría decir que hasta lo echo de menos. Tuve suerte de poder conocer personas como Noelia, Julia, Nuria, Miguel, Ismael, Vero, Rocío, Martín o Jaime. Ellos y ellas me han alegrado los días y parte de las noches, me he reído mucho (no sabéis cuanto) y he aprendido a no tener vergüenza ni siquiera en inglés. En español nunca la he tenido, y ahora en inglés tampoco tengo miedo a equivocarme. Fui a aprender y lo he hecho. No me olvido de Ziggy, Gaby o Mike, sin duda, gracias a ellos he aprendido muchas cosas pero sobre todo que tener profesores de inglés tan agradables hace que despertarse por las mañanas tan temprano no sea un tormento sino una alegría :) 

Pero siendo sincera y honesta, el fin último de mi visita era pasar unos días con la familia. Me ha sabido a poco, mejor dicho a muy poco. Conforme me he ido haciendo mayor he ido valorando mucho más los momentos en familia, y añoro no sabéis hasta que punto esos instantes cuando estoy en Madrid. Soy una afortunada por poder estudiar lo que quiero donde quiero pero me estoy perdiendo cosas que para mi son impagables como es pasar más tiempo del gran tesoro que es mi familia.

Me encanta ir a la Comunidad Valenciana, lo reconozco. Mis tíos/as y mis primos/as son encantadores y me tratan como una reina. He podido desconectar unos días de la rutina diaria de Olivenza, y podido dejar aparcada la política por momento, que si he ser aun más sincera, a ratos hasta me cansa.

Estando en Valencia, al salir de un gran concierto de flamenco en "El Café del Duende" un amigo de mi primo me dijo: "Que viva Ibarra". Debió de ver mi cara iluminada y mi sonrisa con hoyuelos en la cara, porque me dijo: "te he pillado, escribes con la derecha como yo pero eres zurda". 

Lucía está muy grande, y aunque el primer día no quería hablarme, el último me convertí en su amiga y compañera de juego. Mis tíos y mis primas estaban como siempre, parece que la vida no cambie. Y Vall D'Uxó es para mi un lugar donde he vivido grandes momentos con mi prima Cristi que no cambio por nada. Pasamos allí muchos veranos de nuestra infancia, y eso es lo más preciado que tengo.

En Paterna he de reconocer que me he llevado más que una sorpresa, una gran alegría. Llegué algo alicaída y si por mi hubiera sido me habría quedado allí una semana más. He conocido a Iván después de haber oído hablar de él tantas veces. Es un chico de los pies a la cabeza, con sus ideas claras y más parecido a mi de lo que podía imaginarme. Para el la familia es más que parte de su vida, lo es todo, y en eso me siento más que identificada. He podido disfrutar de ese placer de la vida que son las comidas familiares, las charlas por las tardes al fresquito en la puerta, los paseos tranquilos y hasta la alegría que da encontrarse con extremeños en la otra punta del país. Las puertas de mi casa están abiertas y esto es sólo el principio. No cambies nunca porque con poco haces feliz a mucha gente :)

El título de este post es "Señales", y lo he titulado así porque a pesar de no haberle nombrado él ha sido quien me ha mandado la señal y gracias a quien siento una felicidad extrema por ser quien soy. 

Abuelito, gracias y hasta siempre.

Pdta: A mi tampoco me gustan las despedidas ;)

María.

martes, 24 de julio de 2012

He cometido un delito: Ser Mujer.

Lamentablemente, aun en pleno siglo XXI, la realidad nos lleva a darnos cuenta de que para muchos las mujeres no somos dignas de tener empleos, conseguir puestos de representación en partidos políticos, desempeñar funciones importantes en cargos institucionales, ser autónomas, liderar grandes empresas o formar parte de los Consejos de Administración de los bancos más importantes del país.

He cometido un delito: Ser Mujer. Lo cometí en el momento en que nací, pero la pena de cárcel ha ido en aumento conforme mi conciencia no me ha permitido pasar por alto determinadas injusticias que atentan contra la igualdad, la libertad y la dignidad de las mujeres. 

Es muy fácil tratar de insultar a una mujer, es fácil tratar de denigrarla con palabras obscenas y sin sentido, y más fácil es aun catalogar a alguien de algo que no es si por medio se encuentra un trabajo bien hecho y una trayectoria llena de aciertos y errores.

Habré podido cometer muchos errores, pero nunca nadie me habrá oído faltar el respeto a otra persona ni mucho menos denigrarla para tratar de destacar sobre ella. Nunca me ha hecho falta medir 1.90 para valer como persona, ni cuando era niña, ni cuando era una adolescente, ni ahora que voy siendo una mujer. Nunca me he achantado ante nadie ni tampoco la cobardía ha sido un adjetivo con el que me catalogaran. Tampoco han podido conmigo las malas artes en unas elecciones, ni los trapicheos baratos o filtraciones engañosas a periódicos. No he amanecido en un pantano ni en una cuneta tirada -aunque amenazas haya habido-, ni me ha dado miedo reconocer jamás que soy Socialista, Feminista y defensora de los Derechos Humanos.

Ahora bien, quiénes a través de la pantalla de un ordenador o a través de las redes sociales han tratado de faltarme el respeto, amenazarme o denigrarme como persona, sólo han conseguido una cosa, y es hacerme mucho más fuerte.

Por suerte no se necesita ser multimillonaria para ser una persona digna y actuar como tal, tampoco se necesita tener más cabeza, un color de pelo determinado o medir casi dos metros. La dignidad humana se gana a base de no hacer a los demás lo que no nos gustaría que nos hicieran a nosotros. La dignidad humana  no tiene nombre de hombre o mujer, tiene nombre de PERSONA, y como tal catalogaré a alguien que tenga un comportamiento DIGNO con la clase humana.

Muchas gracias y buenas noches,

María Núñez.

viernes, 6 de julio de 2012

Gracias y Hasta Siempre.

Hace unos días tuvimos que despedir en Olivenza a un amigo. Carlos era capaz de sacarte una sonrisa con poco que dijese, capaz de animarte y de hacerte pensar que frente a las cosas que sí tienen solución, llorar no es la mejor manera de conseguir lo que uno quiere.

El año pasado, -concretamente, aquél 22 de mayo que siempre recordaré- cuando ya había acabado el recuento de las elecciones y habíamos perdido en Olivenza y en Extremadura cogí un gran sofocón. Lloraba por muchas cosas, pero sobre todo por rabia contenida y por mi abuelo. No fue el mejor día de mi vida precisamente, tenía guardados demasiados sentimientos y los nervios contenidos me llevaron al llanto descontrolado.

Recuerdo que puse un tweet en el que se reflejaba mi estado de ánimo y no dije nada más hasta el día siguiente. Carlos me escribió un mensaje, y me dijo: "Te conozco, cada vez que me encuentro a tu padre, le pregunto por ti y por como te va con la carrera." Reconozco que yo no sabía quien era. Seguimos hablando, y las últimas palabras que esa noche me dijo fueron claras y concisas: "María, no llores por las cosas que tienen solución, esto son sólo cuatro años. Lucha por lo que quieres y camina con la cabeza bien alta. No te desanimes".

Con el paso del tiempo y siendo incapaz de borrar esas palabras de mi cabeza, reconozco que cada vez que las recuerdo es inevitable que no me vengan a la mente muchos recuerdos y que la cara se me empape de lágrimas. Recuerdo cuando hice selectividad y aprobé con nota, y me dijo a través de un buen amigo, -que si me permites, me gustaría nombrarte Germán- que no me lo pensara y que Ciencias Políticas sería la carrera con la que realmente sentiría que he encontrado mi sitio. 

Lo cierto es que han pasado los años y eso ha sido así. No me equivoqué de carrera, al igual que hoy sé sin necesidad de pensarlo más de un segundo, que no me he equivocado de opción. 

Estoy orgullosa de un trabajo bien hecho, de unos compañeros y compañeras que han dado lo mejor de sí, con ilusión, con ganas y pensando en la gente. Esta semana que hemos estado de ruta por Olivenza he aprendido muchas cosas, pero sobre todo que el trabajo en equipo es la premisa clave para que algo funcione, y en este caso, para que un partido como el PSOE funcione. 

He visto en las caras de la gente las ganas de recuperar algo importante que nunca debimos haber perdido: La ILUSIÓN. Porque la ilusión es aquello que nunca debe perderse, ya que a pesar de que pasen los años, es lo que hace que el niño que todos llevamos dentro permanezca siempre vivo. He tocado la felicidad con las manos, y he podido hacerlo al lado de grandes personas que ya son amigos y amigas. Gracias Enrique, por la tranquilidad que me aportas y la atención que me prestas, Kiko porque eres capaz de aportar algo importante: experiencia; Modesto por tu tranquilidad, serenidad y la necesidad de seguir mirando hacia el frente, este es el camino compañero!; Toni, por tu saber estar y el empeño que le has puesto a esta locura que hará historia; a Moya, por aportar de sí todo lo que puede y jamás pedir nada a cambio; Isa, por enseñarnos tanto en tan poco y por no perder de vista nunca Olivenza; Héctor gracias por dar lo mejor de ti y por demostrar que los principios están por encima de muchas cosas y que por tanto no se venden, y Justo gracias por enseñarme muchas cosas, por valorarme, por contar conmigo y sobre todo, por recordarme en cada momento que mi abuelo si hoy pudiera verme estaría más que orgulloso de mi.

A todos y todas, GRACIAS por hacerme sentir partícipe de la Ilusión, las ganas y la necesidad de recuperar la confianza de un pueblo que le pese a quien le pese, es Socialista. Para que ellos vuelvan a confiar en nosotros, nosotros debemos ofrecerles muchas cosas, pero sobre todo, más que palabras, HECHOS.

Cabeza bien alta, y de corazón, Gracias.

lunes, 25 de junio de 2012

Conciencia de Persona para ser Políticos.

Todos en algún momento tenemos esa sensación de sentir que algo nos falta. Desconocemos el qué, quién, cómo o cuándo, o quizás no... Quizás simplemente querríamos desconocer todo eso pero no podemos pasar en el intento de esperar algo que no llega.

En un momento en el que la participación se convierte en el adalid de la política llegamos a lo que debería considerarse un punto de inflexión en torno a qué esperan los y las ciudadanas de nosotros y que les podemos ofrecer.

Es aquí donde quiero depararme un instante. La ciudadanía -y nosotros no dejamos de ser ciudadanos- espera de nosotros lo que quizás nunca debimos dejar de hacer. Del mismo modo, cada uno de los ciudadanos y las ciudadanas en calidad de personas sin etiquetas esperamos que alguien nos quiera, nos comprenda, nos entienda, nos escuche y nos trate con cariño. Y es que en definitiva, todos esperamos a alguien que quiera lo mejor para nosotros, que sepa perdonar, que entienda que la palabra es el único método para el entendimiento -que hablando se entiende la gente- y que la educación es la mejor arma para combatir la ignorancia.

Entre el ser y el deber ser siempre hay un trecho y en este caso no iba a ser de otra manera. 

En la mañana de hoy, el senador del partido popular, el señor Morano, ha votado en contra de la disciplina del partido pero en favor de los ciudadanos que le votaron en su territorio que no es otro que León. Un lugar que está siendo sacudido como el resto de España y dónde la minería ha sido uno de los grandes activos del norte de nuestro país y ahora se manifiestan para reivindicar que el carbón se defina como un sector estratégico.

Los mineros sienten que el gobierno está jugando con ellos, con sus puestos de trabajo y en definitiva con sus familias que son quienes también sufren las consecuencias.

Hoy desde aquí alabo la actitud de este senador que antes de ser político, es persona y que como tal ha actuado. O mejor dicho, ha actuado como buen político pensando en lo que era mejor para los ciudadanos y ciudadanas que le eligieron como senador. Ha actuado con verdadera conciencia política, como debería ser, aunque a su partido parece ser que no le ha gustado su actitud y le ha abierto expediente con su correspondiente sanción económica. 

Entiendo que los partidos, o al menos el mío, nacen con el fin de servir al interés general porque es para eso para lo que se conforman los gobiernos que están compuestos por personas que se agrupan en partidos políticos. Si en alguna ocasión me veo en la tesitura de tener que decidir entre la disciplina de partido o lo que es mejor para los ciudadanos, sin duda optaré por lo segundo.

No debemos olvidar de donde venimos, y venimos de ser ciudadanos para servir para ellos. Si perdemos esa esencia lo perdemos todo. 

Un abrazo y hasta pronto.

María Núñez.

domingo, 10 de junio de 2012

Cuestión de confianza.


Cuando las cosas van bien, no somos capaces de valorar lo que realmente tiene valor, en cambio, cuando las cosas no van tan bien, somos capaces de aprender a valorar lo que quizás antes no nos habría causado sensaciones tan sumamente satisfactorias.

En los últimos tiempos he reforzado algo que ya sabía que existía: El valor de la lealtad, la amistad y la confianza.

En tiempos en los que lo "interno" se filtra a lo "externo" a veces no siendo todo lo real que fue, me ha dado por ponerme a hacer esto que se llama pensar, y he llegado a varias conclusiones. La primera de ellas es sin duda que la LEALTAD no cae del cielo sino que alguien se la gana a base no sólo de palabras sino también de hechos que demuestran que se convierte en merecedor de la misma. 

Llegados a este punto, entiendo que la AMISTAD (pero la de verdad) es el motor fundamental para que esto se produzca. Alguien es leal a quien se lo gana a base de esfuerzo y de motivos. Tuve motivos para ser leal a unas siglas, a una organización y sobre todo a una persona que depositó en mi su confianza casi desde que me vio por primera vez. La CONFIANZA ni se compra ni se vende, se gana. ¿Y sabéis como se gana? Teniendo como mejor aliado al trabajo, la ilusión y la lealtad.


Tengo que hablar del pasado para poder hablaros de presente. Y es que hace unos días tuve la oportunidad de poder aclarar con una compañera malos entendidos. Le contaron de mi una realidad de que no existía y que por tanto se basaba en un espejismo, y tuve la oportunidad de poder mostrarme tal y como era, tal y como siempre he sido para que viese que todo lo que anteriormente había creído de mi nada tenía que ver con lo que realmente era. 

He tenido tiempo además de sentarme tranquilamente con el que desde hace más de 8 años considero uno de mis mejores amigos, profesional donde los haya y una persona que consigue todo lo que se propone porque ganas, ilusión y esfuerzo no le faltan. Hemos trabajado juntos en muchas cosas, y estoy convencida de así seguirá siendo. Somos un equipo, porque para ser un equipo se necesitan esas tres cosas: Lealtad, Amistad y Confianza.

Hace casi dos años, la primera vez que tuve delante a quien a día de hoy conforma algo importante en mi vida, le juzgué sin antes depararme a conocerle. Hice oídos sordos de lo que tenía delante fiándome de lo que decían quienes nada sabían de él. Cometí un error, y lo subsané. A día de hoy, puedo decir y digo que es una de las personas más leales que he conocido en mi vida. Sé que para él, el valor de la amistad y la confianza están por encima de cualquier interés, ya que la lealtad bien merecida está por encima de cualquier interés.

Lo que trato de deciros hoy es que ante la necesidad de cambiar el mundo y darle la vuelta, necesitamos que se recuperen valores tan importantes como la Lealtad y la Confianza. Insisto en la idea de que ni se compran ni se venden, simplemente se ganan, y no precisamente a base de dinero sino a base de trabajo y meritocracia.

Me quedan seis días para dejar esta ciudad donde he disfrutado, he llorado, he reído y he aprendido, pero sin duda me llevo amigos, de los buenos, entre los que se encuentran Ruth y Borja. Por haber estado, por estar y porque sé que seguirán estando.

Comenzamos...

María ;)

sábado, 2 de junio de 2012

Memoria Histórica Colectiva.

Hoy es una día especial. En un día como hoy hace 88 años nacía mi abuelo Ignacio, sin duda, el mayor referente que tengo para creer en la palabra POLÍTICA.

Muchas veces he hablado aquí de lo que el supuso y sigue suponiendo para mi. El no poder darle un abrazo reconozco que es algo que llevo bastante mal, pero me queda algo, su recuerdo en mi memoria. Y es eso de lo que hoy quiero hablaros, de la memoria. 

Para muchas personas de este país, lamentablemente hablar de Memoria Histórica sólo representa el pasado, en cambio, para mi, representa el pasado, presente y futuro de este país y sus ciudadanos y ciudadanas.
El pasado nos marca y nos condiciona, y no debemos ni podemos olvidar la historia que hacen que nuestro país sea de una manera y no de otra.

Pensar en el futuro, sin olvidar el pasado y actuando en el presente. Creo que esa es la clave para hablar de Memoria Histórica Colectiva.

Mi proyecto de fin de curso para una de las asignaturas de este penúltimo curso de mi carrera se está convirtiendo en una gran motivación. 

Decidí investigar sobre la Memoria Histórica, decidí crear un Centro de Memoria Democrática. Y os preguntaréis que de qué estoy hablando. Pues muy fácil, hablo de la necesidad de que los más pequeños conozcan la historia de España y que entiendan que no hay mejor arma que la palabra para combatir el miedo. Nunca una sociedad fue justa ni libre si se usaron las armas en lugar de la palabra. 

En tiempos como estos donde encontrar trabajo es encontrar un tesoro, considero que los gobiernos tanto autonómicos como el gobierno central deberían apostar más que nunca por la formación y la educación porque un país cuyos ciudadanos y ciudadanas no han sabido dar la importancia que merecen estas dos palabras, jamás lograrán entender por qué es imprescindible invertir en ellas. 

He visualizado que ni en el Ministerio de Cultura ni en la Consejería de Cultura de la Junta de Extremadura se ofertan subvenciones para jóvenes emprendedores con ideas innovadoras, ni para la formación, ni para el progreso académico y educativo...

Cada día que pasa reconozco menos el país en el que vivo y la Comunidad en la que tuve la suerte de nacer. Antes sabía que crecía en una sociedad donde la igualdad de oportunidades era la premisa clave para el progreso, ahora, cada día me acuesto pensando con qué habrán acabado al día siguiente.

Badajoz fue la provincia más represaliada de toda España durante la Guerra Civil y la dictadura, el aprobar la Ley de Memoria Histórica en el año 2007 no fue el fin de un bonito sueño sino el comienzo de una lucha que no debe acabar hasta que se haga verdadera justicia.

domingo, 27 de mayo de 2012

Defendiendo la Igualdad de Oportunidades.


No fue fácil el camino, pero todo trabajo tiene su fruto, y ayer, Juventudes Socialistas de Extremadura recogió lo sembrado desde el 6 de octubre de 2007. A partir de entonces, comenzó a crearse un proyecto regional, el cual ayer tuvo un gran punto de inflexión.

Ayer fue el 8 Congreso de Juventudes Socialistas de Extremadura, Juanra se despidió de todos nosotros y nosotros le agradecimos su entrega, su valentía y su liderazgo de estos años. Ha puesto a Juventudes Socialistas de Extremadura a la altura de la organización, y la ha triplicado en importancia federal. Ahora se nos tiene en  cuenta, ahora contamos y ahora nos cuentan. Gracias Juanra, por haberme enseñado mucho de lo que sé y por haberme hecho ver que como dice Guillermo, el tiempo en política es muy relativo y que cuando menos los esperamos, llega lo que nos merecemos. Gracias por hacerme entender en la necesidad de estar unidos, de elaborar un proyecto común y en demostrarme que si se quiere, se puede hablar de Cáceres y Badajoz hablando tan sólo de Extremadura. 

A ti Soraya, darte las gracias ya no sólo por contar con Olivenza para tu ejecutiva regional, sino por darme la oportunidad de defender desde la Secretaría de Igualdad, la necesidad de que todos y todas podamos tener la misma voz, y eso se llama IGUALDAD DE OPORTUNIDADES. Igualdad de oportunidades en educación (mi tiempo en FAEST es algo que jamás olvidaré) igualdad de oportunidades en la sanidad (Guillermo ha sido el mejor consejero de Sanidad que ha tenido esta Región llamada Extremadura y nos ha hecho ver la importancia de ser los primeros en ella) igualdad de oportunidades en todos y cada uno de los ámbitos, también en el de recuperar la memoria colectiva, en la justicia, en la libertad... Si partimos de la misma base, seremos tan iguales como libres. Por eso, gracias, porque daré de mi lo mejor que tengo y estoy convencida de que mis compañeros y  compañeras de Juventudes Socialistas de Olivenza tendrá muchísimo que aportar.

Ayer eché de menos a Rubén Bermejo y Carlos Trujillo en la clausura del Congreso de JSExtremadura. Sé que para ellos ha sido una gran alegría verme ahí. Me han enseñado mucho y yo he querido aprender teniéndoles cerca. Han sido compañeros y amigos, y para mi son dos personas importantes en el seno de la organización. 

Conocí a Luis hace casi 6 años en Alicante, mis primeras "jornadas" de Juventudes. Entré por la puerta grande pues se trataba de la IUSY. Ahí pude  ver que con tan sólo 17 años (él) tenía un gran potencial. Me ha demostrado ser humilde y tener una gran humanidad, me consta la gran labor que está desarrollando como Secretario Provincial, y me gustaría decir algo, ojalá pudiéramos tener en Badajoz, pasado el congreso, alguien tan comprometido, trabajador y honesto como tú. Gracias, de corazón.

A Iñaki le he dado las gracias por partida doble ya, pero nunca está de más. Eres un campeón, has estado brillante estas semanas, y te agradezco cada palabra con la que tratabas de quitar hierro al asunto. Para lo que sea, aquí estamos y en Olivenza está tu casa.

No puedo terminar esto sin acordarme de alguien que ha sido clave para mi en este últimos mes. A día de hoy es mi Secretario de Organización, se llama Julio -Julito para los amigos- y ha sabido estar en todo momento que le he necesitado. El trabajo se recompensa con más trabajo y eso es lo que tu has conseguido. Sé que lo harás genial, que vas a estar a altura y que toda aquella persona que te conozca sabrá por qué hoy es para mi tan importante mencionarte aquí.

Tenemos trabajo, mucho trabajo, y puedo prometer y prometo que daré de mí todo lo que tengo, sumaré mis ganas de aprender, mis ganas de progresar y mis ganas de poder decir que hombres y mujeres, somos iguales y por tanto, merecemos actuar en igualdad de condiciones y en igualdad de oportunidades.

Gracias, y a trabajar.

María Núñez.

jueves, 24 de mayo de 2012

Adelante, compañera: Soraya Vega.

El próximo sábado 26 de mayo se celebra el Congreso Regional de Juventudes Socialistas de Extremadura que pondrá punto y a parte a la labor desarrollada por el hasta ahora Secretario General, Juan Ramón Ferreira. Y digo punto y a parte, porque espero que la próxima ejecutiva regional, continúe la labor emprendida por mi querido compañero y amigo, esperando que sea continuista en los aciertos, y reformista en los errores. 

Conocí a Soraya hace poco más de dos meses, y me bastaron unas horas con ella cara a cara y en completa soledad, para darme cuenta de que lo que tenía delante era lo que los jóvenes socialistas extremeños estábamos esperando para esta nueva etapa que comienza el próximo sábado.

Soraya es una chica formada, con su carrera y su máster; cree en la necesidad de implantar la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres en esta sociedad que no acaba de entender que ambos debemos gozar de las mismas oportunidades; admira la labor realizada por el Socialismo en este país; siente la necesidad de dar voz a los jóvenes como motor de Extremadura; tiene un proyecto creíble, idealista e ilusionista para Extremadura, que no olvidemos, se compone de Cáceres y Badajoz; y lo más importante, cree en lo que dice, y dice lo que cree.

Desde aquí quiero mostrar mi más sincero respeto hacia el otro candidato, que además de ser un gran compañero me consta que es un trabajador nato, pero también le pido que entienda y respete que a pesar de que él no ha sido mi opción, el proyecto que apoyo no representa "intereses privados" sino intereses comunes.

Debemos hablar de algo: Extremadura y debemos hacerlo con algo: Con respeto. No olvidemos que la máxima de la democracia interna debe ser por encima de todo la libertad y el respeto, y en ambos valores se encuentra la esencia de la propia democracia. Libertad para poder elegir, y respeto para saber aceptar.

Puedo decir y digo que el sábado puede ser un día grande, y espero que lo sea. Soraya puede convertirse en la primera mujer que consigue alzarse con la Secretaría General de Juventudes Socialistas de Extremadura. Haríamos historia a nivel de Juventudes, pero también la haríamos a nivel de partido. No estoy diciendo con esto que haya que apoyarla únicamente por el hecho de ser mujer, NO, estoy diciendo que sería un gran modo de demostrarle a nuestros "mayores" que conocemos el sentido de la igualdad efectiva entre hombres y mujeres y que esto, podría ser la prueba de que los jóvenes conocemos el sentido de la igualdad de oportunidades.

Quizás ella lo tuviese más difícil desde el principio por el hecho de ser mujer, pero ha sabido rodearse de buena gente y un gran equipo que en ningún momento la ha dejado sola ni lo hará. Nos tienes y te tenemos, y espero, que los jóvenes extremeños puedan ver en ti lo que aquella noche en aquella gran ciudad yo pude ver en tus ojos: Honestidad, Honradez, Valor, Sensatez, Humildad, Carisma y lo último y no por ello menos importante, Ilusión.

Puedo decir alto y claro que me siento orgullosa de ti y que te apoyo porque creo que eres lo que necesita esta organización y lo que piden los jóvenes de la izquierda: Alguien capaz de plantar cara a quienes no se atreven a "enfrentarse" a los ciudadanos en su día a día, y alguien que pueda decir, en primera persona, que nada es imposible porque ha conseguido lo que hace años parecía un gran sueño: El hecho de que una mujer pudiera liderar una organización Política del calibre de Juventudes Socialistas de Extremadura.

Fuerza, y a por todas compañera.

Adelante, compañera.

María Núñez.

miércoles, 16 de mayo de 2012

Hace apenas 15 años.

Hace 15 años en un día como el de hoy -ya es 17 de mayo- recuerdo que estaba en casa de mis abuelos. Tengo lagunas acerca de cuando me llevaron mis padres, pero sin duda, se me hace un nudo en la garganta cada vez que llega el día 17 de mayo.

Nunca volvieron a ser iguales mis cumpleaños. Antes estaban llenos de luz, de armonía, de ilusión... ahora todo es distinto. Cada 11 de mayo en sí, ha sido diferente, pero reconozco que todo cambió aquel 17 de mayo de 1997.

Dos de la felicitaciones más bonitas y que más me han llenado este año, han sido las de mi prima Marta (como siempre y para no variar) y la de mi hermano.

Veréis, mi prima siempre ha sido la hermana que nunca tuve y siempre quise tener. A pesar de que es mayor que yo apenas meses, puedo decir que siempre hemos ido muy a la par. Muy parecidas pero muy diferentes. Nuestros gustos coinciden a veces, otros no, pero jamás hemos discutido ni nos separado por muy lejos que estuviésemos. Hemos compartido lo más preciado que un ser humano puede tener: su infancia. Hemos sido felices jugando a las muñecas, a los pin y pon, a las barbies, viendo grandes películas que siempre recordaremos (Daniel el travieso, Solo en casa, Este chico es un demonio, las gemelas Olsen, Una pandilla de pillos...) y un sin fin de momentos que tengo grabados en mi retina. Ella con su aparente timidez y yo con mi cara dura irresistible, siempre hemos conformado el tándem perfecto.

El 26 de julio de 1997 nació mi hermano. Yo tenía 7 años y reconozco que siempre me ha gustado tener todos mis juguetes en su sitio y siempre he hecho del orden una forma de vivir. Mi hermano fue creciendo y se acabó el orden y desaparecieron algunos juguetes... Esa mirada de pillo que siempre ha tenido y que conserva, esa vitalidad que le hacen ser un revoltillo y ese cariño que siempre muestra por la gente a la que quiere a pesar  de que es un poco contestón en ocasiones y algo maleducado en otras.

Somos muy diferentes, y eso que mis padres nos han dado la misma educación a ambos.  A el siempre le ha costado mas "comportarse", a mi decirle a la gente a la que quiero, que la quiero mirándole a los ojos. No somos perfectos, pero reconozco que desde que estudio fuera y a pesar de que me saca de mis casillas, cada vez que vuelvo a Olivenza me entran ganas de pasar más tiempo con él. No he podido ayudarle con los deberes estos años que llevo fuera, aunque seguro que el no me lo habría pedido... ¡es un orgulloso!

Mi abuelo hubiera dado lo que tenía por conocer a mi hermano. De haberlo hecho, hubiera sido su ojito derecho, estoy segura de ello. Hoy hace 15 años que mi abuelo se marchó. No me gusta utilizar otras expresiones, porque estoy segura de que cuando por las noches, en verano, desde la ventana de mi habitación miro al cielo, una de las estrellas que más brilla es la suya.

Se trata de la estrella que alumbra mi camino y me ayuda en la toma de decisiones. 

Gracias, y hasta siempre abuelito, porque pase el tiempo que pase, siempre estarás formando parte de nuestra vida.

Te quiere,

María.

lunes, 7 de mayo de 2012

Probablemente.

Probablemente siga teniendo parte de esa inocencia que todo niño adquiere en el momento en que llega al mundo. Quizás sea esa inocencia la que me lleve a pensar que lo que yo no le hago a los demás, tampoco ellos me lo harían a mi. Siendo así, resulta realmente triste, enterarse por terceras personas de que no todo lo que parece oro, verdaderamente lo es.

En las últimas semanas he recibido mucho cariño y muestras de apoyo por personas que me conocen, me valoran y saben lo que me duele y lo que me preocupa. Y no, no me estoy refiriendo al hecho de tener más o menos seguidores en twitter -últimamente está de moda sentirse guay por decir en twitter lo que no se es capaz de decir a la cara, por ejemplo. ¿En busca de qué? De lo que comúnmente se denomina "followers"-. Me refiero nada más y nada menos, al cariño que me muestran quiénes saben que la sinceridad es una cualidad que me acompaña.

Habré podido cometer errores, probablemente muchos más de los que me imagine, pero me niego a reconocer algo que no es cierto, y es que jamás le he faltado el respeto a ningún compañero o compañera por pensar diferente.

Quien defiende la democracia, sea interna o externa, debe entender que democracia es aceptar también las reglas del juego donde el respeto, la educación y la coherencia, juegan un papel más importante. Democracia significa saber respetar el resto de decisiones aunque sean diferentes, y democracia supone saber aceptar que un amigo no tiene por qué pensar siempre como nosotros, ya que los verdaderos amigos son aquellos que te quieren tal y como eres, cuando piensas igual y cuando no lo haces.

Pues bien, en estos días, como decía, he sentido el cariño y el apoyo de muchas personas. Me ha faltado el de otras, pero esto me está sirviendo para saber que -como dice mi padre- los amigos se cuentan con los dedos de una mano.

Reconozco que este va a ser un cumpleaños diferente, y reconozco que tengo un nudo en la garganta en este momento, pero papá y mamá, si me leéis -que creo que sí- entender por diferente no un cumpleaños triste, sino un cumpleaños rodeado verdaderamente de personas que han demostrado que están conmigo en los buenos y los no tan buenos momentos. 

Insisto en lo que llevo repitiendo estos días. Voy a preocuparme por aprobar y por poder volver a Olivenza lo antes posible, porque he de reconocer, que es allí donde sé que puedo ser feliz y donde no voy a sentirme tan sola como las últimas semanas en Madrid. A Borja, Ruth, Víctor y Paola me cabe darles las gracias, aunque como están hartos de repetirme a los amigos no se les dan las gracias. Caty por ser tan grande como persona y por ese afán de superación continuo. Y a mis compañeros y compañeras de Extremadura, -sin nombres porque saben los que son- por demostrarme en Olivenza que juntos podemos llegar tan lejos como queramos, y llegaremos.

Gracias, de corazón.

María.