lunes, 17 de septiembre de 2012

La estrella de los tejados.


Si hoy fuera mi última entrada del blog tengo claro de lo que no hablaría, pero no sabría deciros cuál sería el tema estrella de mi post. O sí, realmente si sé de que hablaría, de todo aquello que me hace sentir especial. Y me siento especial cuando tengo alrededor personas que me quieren, que me transmiten sus deseos, experiencias y sensaciones varias. Me siento feliz hablando con la gente, escuchándoles, entendiéndoles, y en la medida de lo posible, ayudándoles. Para mí hablar de Madrid y de Olivenza, supondría hablar de dos lugares emblemáticos e imprescindibles en mi vida. Lugares donde he crecido como persona y he alcanzado parte de mi felicidad. 

Y os preguntaréis que supondría hablar de Política... Hablar de Política, eso sí, con mayúsculas, supondría llegar al estado pleno de madurez. Ese, en el que he sentido lo que era ser libre, en el que he aprendido qué suponía la Igualdad y donde he conocido a quiénes probablemente, me estén enseñando mucho de lo que sé. He conocido lo que supone ser libre y lo que no, lo que significa el compromiso y la responsabilidad, pero sobre todo, he aprendido que cuando algo está de color negro es porque existen motivos para darle otro tono que tenga más luz para desprender. 

Hoy, mientras paseaba con un amigo por las calles de Madrid, hablábamos del sentido de la libertad y de lo que ésta supone para nosotros. Tengo algo claro, y es que si algún día tengo una hija -que espero que sí- el nombre que elegiré para ella será Libertad. ¿Y sabéis por qué? Porque para mí la Libertad supone el estado de todas las cosas; de la Igualdad, de la Responsabilidad, del Compromiso, del Cariño, del Amor, la Familia y la Fraternidad. Para mi, hablar de Libertad supone hablar de vida. Una vida que brille porque tenga luz propia, y eso, sólo puede ocurrir si alguien actúa bajo la responsabilidad y el compromiso de ser completamente libre. 

En un momento como este en el que la situación política y económica es cuanto menos desgarradora, hablar de Libertad puede parecer una utopía. Pero no lo es. La ciudadanía ha salido a las calles, con sus banderas, expresando lo que sienten y lo que quieren, y condenando lo que no quieren. Ante las injusticias del momento, las calles se llena de mensajes, de palabras, se llenan de libertad... sin armas. Sin más arma que el poder y el valor de la palabra. Dejemos pues que cada uno y cada una se sienta libre para poder expresar lo que atañe a sus necesidades, a sus sentimientos, y a sus Comunidades. Las particularidades de España son las que la hacen ser única e irrepetible, y no se trata de romper un país sino de todo lo contrario, cuando en masa miles de ciudadanos y ciudadanas deciden que quieren reivindicar lo que consideran que les pertenece. A día de hoy, no es un crimen querer ser libre, querer ser lo que realmente somos, sin imposiciones, sin lamentaciones y en condiciones de equidad.

Hoy ha sido un gran día, he podido compartirlo con gente a la que quiero, personas que me transmiten sensaciones que no se pueden expresar con palabras. Y quiero compartir con vosotros y vosotras, una canción que representa perfectamente mi estado de hoy. 

Gracias... Madrid ;)

María Núñez.

1 comentario:

Ruth dijo...

Como siempre un placer leerte. Aunque más me gustaría poder darte un achuchón y yo dártelo a ti.

Besos!

R.